Este artículo recoge la opinión de la redactora.
La gestación subrogada es una técnica de reproducción que últimamente está dando bastante que hablar. En España no se reconoce como tal, además de estar prohibida ya que solo se reconoce el derecho a la filiación de un menor cuando está vinculado al parto, pero la realidad es que actualmente muchas parejas recurren a ella como única opción para ser padres.
Las mujeres que hemos tenido cáncer tenemos vetada la adopción por no superar el examen médico necesario para ello, la mayoría de las veces los tratamientos producen infertilidad por lo que esta es la única opción disponible para nosotras.
“Juzgar a las personas que deciden ser padres mediante esta técnica o señalar a los niños como si sus padres hubiesen cometido un delito es algo que ahora mismo está pasando”
Defiendo que se tiene que regular para no generar perversiones del sistema, mafias o atrocidades contra las mujeres. En Estados Unidos por ejemplo se emite directamente la partida de nacimiento y los trámites son más sencillos que en cualquier otro país, ya que ellos lo tienen la gestación subrogada totalmente normalizada dentro de su sociedad. El problema es que el coste se triplica por lo que la posibilidad de hacerlo allí es bastante limitada.
“Nadie puede decidir por nosotras, nadie habla por nosotras si decidimos donar sangre u órganos”
La libertad de poder ayudar a través de la capacidad de gestar debería ser un derecho reconocido, nadie puede decidir por nosotras, nadie habla por nosotras si decidimos donar sangre u órganos. Evidentemente, todo esto apoyado en un motivo médico que sustente la necesidad de utilizar esta técnica o en una situación de esterilidad estructural (parejas homosexuales masculinas o un hombre sin pareja). Nunca como capricho para personas que simplemente no quieran pasar por una gestación o dispongan de recursos económicos suficientes para poder hacerlo como si fuese un capricho más.