Es salvaje cuidarse, alejar lo que no nos hace bien.
Es salvaje abrazarse, amarse.
Salvaje, es darse tiempo y parar la inercia para mirarse al espejo y no mirarse, verse.
Es salvaje, reclamar el amor, la magia y la vida que merecemos y que nos hemos malcreído que no.
Es salvaje, sernos rabiosamente nuestras.
Es salvaje, sernos vivamente diosas.
Es salvaje.
Salvaje y necesario.
Pinta, canta, baila, escribe, grita, transmuta, de cualquier forma.
No importa hacerlo bien o mal, importa hacerlo.