El Ayuntamiento de S/C de Tenerife ha profanado una obra del artista canario César Manrique, cambiándola el color, sin justificación y sin atender las demandas de vecinos de la ciudad, expertos de arte y hasta la Fundación César Manrique piden que las piscinas del Parque Marítimo vuelvan a su color blanco original, respetando la obra del artista y su legado artístico-cultural.
Un grupo de vecinas de Santa Cruz de Tenerife, compuestas por arquitectas, ambientalistas y abogadas, además de ser seguidoras del brillante trabajo de César Manrique y su legado en las Islas Canarias, llevan más de un año viendo cómo una de las obras más representativas de la ciudad, el Parque Marítimo de Santa Cruz de Tenerife, ha sido profanada por el propio ayuntamiento de la ciudad capitalina, sustituyendo de sus piscinas el color blanco clásico y representativo del artista por un artificial azul, creando un peligroso precedente. El ayuntamiento lo hizo aprovechando la pandemia dentro de una inversión de remodelación de 360.000€. Este medio se ha puesto en contacto con el ayuntamiento de la ciudad y el staff del Parque Marítimo, en 4 ocasiones, nadie ha querido hacer declaración al respecto ni justificar su decisión, seguimos sin respuesta.
El 31 de marzo de 2021 el Alcalde de Santa Cruz, D. José Manuel Bermúdez del Partido Popular visitó el Parque Marítimo destacando la “buena imagen” de este tras sustituir el blanco de la obra y pintarla de azul y declaró para Europapress:
Según fuentes del Ayuntamiento además de pintar las piscinas se cambió el tendido de fontanería exterior. Hemos logrado saber que la pintura utilizada es un esmalte de poliuretano Poxemyc UV. Hemos contactado con la empresa que suministró la pintura al Ayuntamiento, para preguntarles por la elección que hizo del color y por si había alguna justificación para el cambio, recogemos sus comentarios:
El 22 de marzo de 2021, tan sólo 8 días antes de la visita del alcalde al Parque Marítimo, una vecina chicharrera experta en arte y arquitectura, hizo una reclamación al Ayuntamiento aportando un completo dossier, al que hemos tenido acceso, llamado “Condecorar la decadencia” donde alineado con los Objetivos de desarrollo sostenibles de Naciones Unidas exponía su malestar por “El destrozo del patrimonio cultural”. También lo envió a medios de comunicación y a la Fundación César Manrique, más de un año después sigue sin respuesta del ayuntamiento.
La Fundación César Manrique tiene por objetivo fundamental: “Conservar la obra y legado de César Manrique” por eso este grupo vecinal a se ha puesto en contacto con una consultora de impacto social y ambiental para que intermedie con la fundación para activar los mecanismos necesarios para salvaguardar la memoria artística y el legado cultural. La fundación según les ha comentado desde mayo de 2021 ha trasladado al ayuntamiento de S/C de Tenerife su preocupación por el cambio de color, a día de hoy siguen sin respuesta. El máximo responsable de la Fundación César Manrique, su presidente Jose Juan Ramírez nos comenta:
“El uso de un nuevo color para el fondo de las piscinas ha provocado, obviamente, un cambio sustantivo en la paleta de color con que se percibe el agua reflejada, y que tiene como consecuencia que el aspecto final se aleje del aspecto habitual en las obras de este tipo del artista”
Presidente de la Fundación César Manrique, D. Jose Juan Ramírez
La consultora de innovación social responsable de contactar con la Fundación César Manrique y ejercer presión para la protección de la obra, se puso en contacto con el PSOE partido que hace la oposición al PP en el Ayuntamiento de S/C con el fin de llevarlo a pleno y votar por la restauración. Según palabras de un miembro de PSOE definió la acción en una palabra:
“Es una barbaridad”
Concejal del PSOE
El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife no ofrece una respuesta ni a la Fundación César Manrique, ni a sus vecinas y votantes, ni a expertos en la materia, ni medios de comunicación, ni consultoras de impacto social y ambiental. Deberían aprender de movimientos de participación ciudadana, como casos de éxito como la cancelación del macro Puerto de Fonsalía, restaurar el daño causado, proteger el patrimonio cultural y analizar sin de los 360.000€ invertidos en la profanación de la obra están justificados. Ojalá este artículo y la movilización ciudadana logren hacer reflexionar al alcalde de la ciudad y entre todos defendamos la memoria y legado de César Manrique.