La culpa no existe. Bueno, existe, pero no como nos la han vendido. La culpa es un arma. Es una herramienta que a veces alimenta a la parte opresora para mantener el control. Si consigo que te sientas culpable, conseguiré que parezca que me debes algo, que tienes algo pendiente conmigo. Entonces no te irás…
Redactoras