Estuve pensando recientemente en qué tema escribir para conectar con las demás personas, y miles de ideas llegaban a mi cabeza constantemente, quería hablar de algo que fuera importante, de algo que realmente tuviese sentido para compartir, hasta que encontré mi tema…
Mi cuerpo mis miedos, porque los cuerpos tienen que ser tan importantes para poder definir a una persona, para poder entenderla o asumir que la entendemos, porque todas tenemos que lucir bonitas, con el mejor vestuario, el maquillaje “perfecto”, el trabajo “perfecto” la piel “perfecta”, caras simétricas, cuerpos definidos, gestos femeninos, familias “perfectas”.
Porque tienen que existir estereotipos o estigmas que definen quién es o no es una persona, ni siquiera tienen sentido, tanta publicidad y mercadotecnia que nos ha hecho creer que cada día tenemos que hacer mas y mas para mejorar nuestro aspecto físico, ¿no te molesta que la sociedad tenga estigmas de belleza?, ¿no te molesta que tu familia adopte estos estigmas?… que te digan que tienes que ser delgada para lucir bien, que las lonjitas que tienes se ven mal, no te molesta que constantemente las personas critiquen el estilo de vida de otras. No te molesta estar en conflicto constantemente con lo que tu realmente quieres y con lo que dicta o determina una sociedad, una sociedad que asume que para amarse hay que verse de tal manera, actuar de tal manera y tener tales cosas.
La vida no es perfecta y nuestros cuerpos tampoco, la confianza no se gana de un dia para otro, pero si se puede perder en un instante, toda mi vida crecí creyendo, que ser linda, callada, educada, no decir lo que sentía o al menos no ser tan específica, perseguir mis metas pero en silencio, no gritar demasiado porque los demás se pueden alarmar o verte mal, planear, planear y planear, muchas veces creí que esas eran las formas correctas, por ende mucho tiempo hice de lado mi voz, mucho tiempo escuche lo que los demás querian, confundi los sueños de los demás con los míos, hasta que me di cuenta que no era parte de ellos, me canse el escuchar el tines que, si, tienes que tener, tienes, que hacer, tienes que ser, me enfade tanto del tienes que… que ahora escucho más fuerte que nunca a mi voz interna, ahora realmente sé que es o que quiero, ahora el no encajar al final toma sentido, años atrás jamás me deje ser, hasta que me perdi, si hasta que mi mente me expreso lo que quería por medio de sentimientos inexplicables, como incomodidad, enojo, frustración, fue justo en ese momento que me canse de pensar que tenia que tener un cuerpo perfecto, ser demasiado femenina, delicada, yo no soy esa, soy fuerte, valiente y si puedo decir que no, alsar mi voy y gritar fuerte, aunque los demas se aturdan.
Justo en este momento entendí que mi determinación y mis sueños, no tienen que ver con los demás, justo aquí entiendo que no quiero ser parte del “tienes que”, hay cosas que trabajar tanto individual como colectivamente.