“La ‘Salta Fronteras’ que demostró al Secretario de Estado la imposibilidad de poner puertas al campo en lugares de paso como Mariouari”. Este fue el titular que encabezaba un jueves 22 de enero de 1998 la noticia de un periódico local de Melilla.
El cercado de límites, la invasión violenta en el paisaje, la relación entre los conceptos frontera y peligro; no se me ocurre mejor ejemplo que esta noticia para reflejar todas estas cuestiones de una sola vez.
Los cambios en el paisaje son un claro reflejo de los movimientos sociales y los grandes acontecimientos ocurridos a lo largo de la historia de la humanidad: desde la gran industrialización y la consecuente industrialización del paisaje natural, hasta nuestros días. La cuestión del refuerzo de los perímetros fronterizos, a raíz del aumento masivo de movimientos migratorios, está a día de hoy más presente que nunca en el territorio español, especialmente en sus fronteras fuera de la Península situada al norte de África, en las ciudades de Ceuta y Melilla.
Las siguientes series fotográficas muestran la “mutación”, el cambio (ya que no podemos considerar evolución a los siguientes hechos), del perímetro fronterizo de la ciudad a través de cartografías y fotografías tomadas de una valla que, en sus inicios no era más que algo simbólico, llegando a ser hoy objeto de disputas y controversias, debido al contexto estratégico-geográfico-político en el que se encuentra.
Una serie fotográfica que nos muestra esta variación a lo largo del tiempo, de los flujos migratorios y la lamentable situación que aún hoy podemos observar en las imágenes.
Si bien es evidente que con solo ojear estas series, se puede apreciar una modificación en la imagen del paisaje a nivel visual, con un refuerzo extremo del perímetro. ¿Qué puede transmitir si no el miedo a lo que hay al otro lado? Lo que en el año 1950 se celebraba, el flujo migratorio, como si fuera una fiesta más de la ciudad, el día del turismo en la ciudad de Melilla, hoy se intenta evitar por todos los medios, vulnerando en algunas ocasiones el respeto a los derechos humanos.
Conceptos como límite, valla, o inmigrantes son transmitidos a las nuevas generaciones con una gran carga de carácter totalmente negativo, relacionados con el miedo, el peligro y la delincuencia.
Melilla por su situación geográfica ha sido siempre y será un lugar de paso, y hoy lo sigue siendo, para víctimas de guerras y de pobreza, que como muchos españoles hasta hace poco tiempo, buscaban una oportunidad. Más allá de esas connotaciones negativas que albergan en el refuerzo del perímetro fronterizo, y haciendo referencia a la noticia que ha desencadenado esta reflexión, 20 años después se reafirma la imposibilidad de poner puertas al campo en lugares de paso.
Desde luego que aunque sea un tópico pero las verdaderas murallas las tenemos todos en la mente.
Es una pena que siempre se dé más importancia a las diferencias que a lo que tenemos en común, me parece que los conceptos de “frontera”, “mi país”, “Europa”, todos estos conceptos deben ser superados, es una concepción que solo hace que nos preocupemos de lo que tenemos encima y nos olvidemos de lo demás, y me refiero no solo en lo referente a las fronteras, si no también en cuanto al clima, los animales, la discriminacion, etc.
Ojalá estos artículos formaran más revuelo.
Se habla mucho de los muros, pero muy superficiamente, muy interesantes e importantes éstas reflexiones.
La naturaleza geográfica de ciertos lugares es inevitable y hay que trabajar en torno a ellas con un enfoque integrador y de respeto. Es una lástima que se aplique una doctrina totalmente contraria.
Gran artículo. Y muy de acuerdo con el comentario de Jaime. Las fronteras nos empequeñecen como seres humanos, como los nómadas que seguimos siendo, especialmente en el caso de los que NECESITAN buscar una vida mejor fuera del espacio que les ha tocado. Qué gran necedad pensar que el mundo se debe compartimentar.
¡qué razón tienes!
estupendo artículo
Lo comparto!
Ojala y hubiera más artículos así k informaran de la verdadera realidad ,increíble el trabajo de Natalia Conde
Enhorabuena Natalia por tu artículo y por la elección de las fotografías que demuestran ambos tu sensibilidad social y tu gran capacidad para el arte. No los abandones y sigue estos caminos para los que estás tan dotada. Gracias por tu artículo. J.M.M.L
El contraste entre una serie de fotos y otra es impresionante y una muestra muy visual de cómo es la actualidad. Muy interesante artículo
¡Muy interesante y cierto! Qué pena de sociedad egoista en la que vivimos…
¡Qué visual esta manera de construir mundos (y ciudades) más duros e inhumanos! Qué ejercicio tan necesario. ¡Gracias!
¡Qué ejercicio necesario es este de ver cómo quedan secuelas de nuestras acciones en la construcción de mundo más duros…! Muy interesante.
Enhorabuena buena Natalia, estupendo artículo.