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Claves para entender el conflicto talibán

Los talibanes surgieron a comienzos de los 90, a partir de disputas internas por el control de Afganistán, según Zahid Husain, experto en etnias, “el fenómeno talibán es un movimiento construido sobre fundamentalismo islámico y un conservacionismo cultural Pastún  y al contrario que Al Qaeda, los talibanes solo aspiran a someter a su propio pueblo y sobre todo a las mujeres y niñas”.

El islam es interpretado según sus convenciones, hombres misóginos aplicando leyes e implantando un código penal en el que se imparte castigo físico y pena de muerte  para todos los enemigos del gobierno.

En el caso de las mujeres aún es mucho peor, han sido apartadas de las calles, silenciadas y tapadas de pies a cabeza, la música y todo lo relacionado con la cultura es prohibido, las mujeres son retiradas del parlamento y vetada su entrada en escuelas y universidad.

La asociación RAWA ha tratado de explicar los abusos que sufren mujeres y niñas, aseguran que: “Los talibanes quieren una sociedad segura y pura, donde la castidad y dignidad de la mujer sea algo sacrosanto, como recogen las escrituras pastún”.

RAWA ha elaborado una lista de castigos infringidos a mujeres si no cumplen las normas, y explican que “solo con echar una ojeada a la lista se puede ver la infernal vida que las mujeres afganas son obligadas a llevar”.

Las prohibiciones llegan a tal extremo que incluso en hospitales, mujeres con patologías menores, fallecen por falta de atención médica ya que los hombres no pueden tocarlas y hay muy pocas mujeres médicos y enfermeras.

La mujer no puede hablar en público, ni reírse ni mostrar el más mínimo sentimiento, están constantemente sometidas a la voluntad de los hombres,  no pueden ni tan siquiera montar en bicicleta, no pueden vestir colores llamativos porque según los talibanes  “los colores llamativos son sexualmente atractivos”.

En el anterior gobierno talibán todas estas prohibiciones las llevaba al extremo tal que si una mujer enseñaba un tobillo era apaleada por provocar el buen hacer de los hombres.

Las mujeres afganas llevan más de un siglo luchando por sus derechos, pisoteados por los diferentes gobiernos. Afganistán ha sido durante siglos un país bélico.

Las mujeres afganas han luchado siempre por sus derechos consiguiendo grandes avances en la década de los 60, pero desde 1979 con las diferentes invasiones y posteriormente en 1996 cuando los talibanes se hicieron con el poder, perdieron todo lo conseguido. Durante 25 años las mujeres se han visto relegadas y apartadas de la vida social, hasta 2001 que llegaron las tropas de EEUU, quitando el poder a los talibanes y dejándolo en manos de civiles, comenzando una nueva era para Afganistán pero ahora, Cuando se estaba empezando apreciar cambios positivos en la vida de las mujeres afganas,  de nuevo los talibanes amenazan su existencia solo por el hecho de ser mujer vuelven a sacarlas  de la vida pública sin poder hacer nada por evitarlo, excepto luchar en la sombra.

La gran diferencia entre el anterior régimen talibán y el actual son las redes sociales. Por suerte ahora contamos con una herramienta que puede ayudar a divulgar y mentalizar al resto del mundo sobre la barbarie que se vive en Afganistán.

Mora Tahalí, profesora en relaciones internacionales conto en una entrevista a la BBC, “al igual que ha ocurrido en otras sociedades en Afganistán  hemos tenido una narrativa por competir por los derechos de la mujer. Tenemos interpretación reformista del islam que se muestran a favor de mejorar los derechos de las mujeres y luego están las interpretaciones de los radicales talibanes que quieren a la mujer fuera de todo lo publico”

Sigue explicando Tahalí  “el gran temor 25 años después es que se repita la historia y todo lo conseguido lo perdamos, y esto también tiene que ver con la orografía e idiosincrasia de Afganistán, donde hay una clara diferencia entre la mujer urbana y la rural, existen pequeñas tribus y etnias donde las mujeres no han notado ningún cambio en los últimos 100 años”

“Nadie confía en los talibanes y su buen hacer, en cuanto tengan el poder absoluto, volverán las prohibiciones, palizas, muertes y desolación”

No todas las mujeres están en contra del régimen, hay muchas que se manifiestan a favor y ven en las otras mujeres que no llevan velo, un peligro para su gobierno, mujeres que obedecen todas las normas por voluntad propia y que ven al resto de mujeres como enemigas del islam.

La profesora Jalali Fesma, nos cuenta en redes como a partir de ver una manifestación de mujeres, todas tapadas de pies a cabeza y todas vestidas de oscuro, alabando a los talibanes, le vino a su memoria los coloridos trajes regionales afganos y pensó en como enfrentarse a sus propias congéneres, de hay le surgió la idea de crear un hastags de apoyo a las tradiciones afganas, #donottouchmyclotes.

Jalali comenta en redes: “publiqué una foto mía con un traje tradicional muy colorido que nada tiene que ver con el negro que imponen los talibanes, vestir nuestra cultura con orgullo es deber de todas,  un grupo terrorista no puede definir nuestra identidad y cultura”

Mujeres que viven con miedo, y a pesar de ello luchan por enseñar al mundo su arte, ahora silenciado por los talibanes, mujeres valientes, artistas, cantantes, influencer, todas están teniendo en las redes un gran apoyo, pero no es suficiente.

L a influencer afgana, Ayeda Shabad, icono en su país, ha subido unas fotos a su perfil comentando  “si los talibanes toman el poder total, las mujeres no estaremos seguras en nuestro país”

Las artistas afganas se expresan y quieren hacer ver al mundo su vida en este momento, amenazadas por los talibanes están escondidas, se enfrentan a una situación peligrosa por ser mujeres y porque con sus publicaciones, grafitis, pinturas, literatura, están violando según los radicales, la ley del islam, consideradas infieles y contrarias al islam.

Las redes sociales están permitiendo saber más sobre el futuro incierto de las mujeres y niñas en Afganistán.

Las mujeres siguen luchando porque se sepa toda la verdad, la periodista afgana Khadija Amian en un post comento  que los talibanes la habían despedido a ella y siete mujeres mas, de la televisión afgana, “puedo sentir el miedo en mis huesos cuando salgo a la calle, los talibanes están en todas partes”.

Beheshta Arghan, redactora independiente en Afganistán, fue detenida mientras se dirigía a su trabajo, por no ir acompañada de un hombre. Esta redactora en una entrevista a la BBC  explico  “no estamos en una buena situación, las mujeres de Afganistán y las del resto del mundo debemos unirnos y luchar, no por nosotras si no por las generaciones venideras”

Y prosiguió, “las mujeres  han cambiado social, sicológicamente y políticamente, la mayoría estamos escondidas por miedo y apenas podemos publicar nuestro trabajo por temor a las represalias, no podemos ni salir de casa”.

La alcaldesa, Zarifa Shafari, concedió una entrevista al periódico El independiente, explicando cuál era su situación actual: “en este momento estoy sentada en mi casa con mi marido y mis hijos, esperando que vengan a matarnos, no hay nadie que nos ayude y lo sabemos que van a venir y matarnos a todos”.

La salida de EEUU y los aliados deja indefensa a la población civil, nadie cree que los talibanes hayan moderado su discurso radical, por eso muchas mujeres huyen temiendo las represalias y otras muchas desde dentro siguen la lucha escondidas, pero haciéndose oír y ver en las redes, el apoyo del resto del mundo es fundamental para la supervivencia de muchas de ellas como Malima Suliman, creadora de numerosas pinturas en las que expresa lo que ven sus ojos en Kabul, artistas callejeras que se la juegan por dejar una expresión de su arte.

Todos desde fuera podemos hacer algo por ayudarlas, hay que dar visibilidad y compartir todas las actividades culturales que se están creando en apoyo a Afganistán. Publicaciones, fotografías, canciones, pintura, entrevistas toda difusión es poca para dar voz a estas mujeres a las que quieren silenciar.

Podéis apoyarlas a ellas y a otras muchas mas, visitando los diferentes blog, compartiendo y difundiendo sus obras,  no se puede consentir que en siglo XXI te juegues la vida por expresar tu arte y mucho menos por ser mujer y no seguir unas normas totalmente degradantes.

Podeis seguirlas en:

@MalimaSuliman

@Shamsia Hassani

@Lida Abdul

@Aryana Sayeed

#Donottouchmyclotes

#Afganistancultura

Susana Cuadrado

¡Próximamente descubre mucho más de esta redactora!

3 Comentarios
  1. Efectivamente no podemos consentir este maltrato a la mujer afgana y en general a todas las mujeres que lo sufren. Gracias por tu escrito, me meteré en sus publicaciones.

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