Sentí la cuerda de mis alas asfixiando mis caminos.
Deslizando una pluma entre mis dedos, acariciando mis recuerdos, descubrí que visualizando desde mi interior cada momento vivido, podría reencontrarme con mi libertad y la liberación de mi destino. Pues descubrí que estaba dentro de mí liberarme de lo vivido.
Unas lágrimas al sentir mis alas que de nuevo en su liberación se agitaban, con ganas de volar más libres y fuertes que nada.
“Pues su liberación se dio, y yo con ellas al alba”
Vuela entre las nubes y el sol.