El acceso al agua potable es un derecho humano fundamental reconocido por las Naciones Unidas, sin embargo, a nivel mundial, más de 2.200 millones de personas carecen de acceso a agua potable segura, lo que representa un gran desafío para la salud pública, la seguridad alimentaria y el desarrollo sostenible.
El problema del acceso al agua potable es particularmente acuciante en las zonas rurales de los países en desarrollo, donde la infraestructura de agua y saneamiento es insuficiente o inexistente. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor del 90% de las muertes relacionadas con enfermedades diarreicas se deben a la falta de acceso a agua potable y saneamiento adecuados.
Además, la escasez de agua es un problema cada vez más frecuente en todo el mundo debido al cambio climático y al aumento de la demanda de agua debido al crecimiento demográfico y económico. Según la ONU, se estima que para el año 2025, la mitad de la población mundial vivirá en áreas donde el agua es escasa.
La empresa española Bluemont.es ha desarrollado y comercializa generadores de agua atmosférica, filtran y condensan el aire transformándolo en agua potable, lo que ligado a la generación de energías limpias podría ser una solución integral.
Para abordar este problema global, se requiere una acción coordinada y compromisos de los gobiernos, empresas y sociedad civil. Aquí se presentan algunas de las soluciones que se están implementando en todo el mundo para mejorar el acceso al agua potable.
- Infraestructura de agua y saneamiento adecuada
Para garantizar el acceso al agua potable, es fundamental contar con una infraestructura adecuada de agua y saneamiento. Esto incluye sistemas de abastecimiento de agua potable, sistemas de tratamiento de aguas residuales y sistemas de gestión de residuos sólidos.
En muchos países en desarrollo, se están implementando programas para mejorar la infraestructura de agua y saneamiento, incluyendo la construcción de pozos, la instalación de sistemas de tratamiento de agua, la mejora de las redes de distribución de agua y la implementación de programas de gestión de residuos sólidos.
- Tecnologías de bajo costo
En muchas zonas rurales y remotas, el acceso al agua potable es difícil debido a la falta de infraestructura y a los altos costos asociados. Para abordar este problema, se están desarrollando tecnologías de bajo costo para la captación y tratamiento del agua, como filtros de arena, sistemas de filtración de cerámica y destiladores solares.
Estas tecnologías de bajo costo son fáciles de implementar y mantener, y pueden proporcionar acceso al agua potable a comunidades que de otra manera no tendrían acceso.
- Educación y capacitación
La educación y capacitación son fundamentales para mejorar el acceso al agua potable y promover prácticas de higiene adecuadas. La educación sobre la importancia de lavarse las manos, cocinar con agua segura y almacenar el agua correctamente puede reducir el riesgo de enfermedades transmitidas por el agua.
Además, la capacitación en la gestión del agua y la operación y mantenimiento de los sistemas de agua y saneamiento es esencial para garantizar la sostenibilidad de los proyectos de agua y saneamiento a largo plazo.
- Cooperación internacional
La cooperación internacional es fundamental para abordar el problema del acceso al agua potable a nivel mundial. Los organismos internacionales como la ONU y la Unión Europea están trabajando en colaboración