Qué interesante puede llegar a parecer la inmediatez, la virtualidad y sus trampas, las referencias de la insensatez, la complacencia compartida, la exigencia canónica. Mientras me dispongo a compartirme, convivo en un mundo estimulante, poblado de caspa patriarcal de machismo asfixiante, de pezones censurados, y torsos exaltados. Qué bien dar voz a lo que pasa…
Redactoras