Un estudio realizado durante más de 40 años por la Universidad de Harvard, afirma que el mundo emocional es uno de los factores más importantes en nuestra salud, y en la enfermedad. Este estudio muestra, que si aprendemos a controlar las emociones negativas tendremos menos posibilidad de enfermar.
Lamentablemente, nos encontramos en un contexto en el que tenemos otras prioridades y las emociones o aprender a gestionarlas, pasan a un segundo plano. Podríamos decir que nos hemos convertido en “analfabetos emocionales”, la carencia de softskills en el entorno de trabajo es una realidad y esto se traduce en problemas de salud que afectan directamente a nuestro rendimiento.
Mario Alonso Puig, es uno de los muchos expertos que defienden que las 3 dimensiones indisociables de la salud son cuerpo, mente y alma. Estas 3 realidades se pueden distinguir, pero están tan absolutamente interrelacionadas que no se pueden separar. El poder de ésta interrelación es tal, que el cuidado de una de esas tres dimensiones puede condicionar positivamente las demás.
Por lo tanto, si lo que queremos es gozar de una buena salud no sólo emocional, sino también física y mental, si buscamos el bienestar tanto personal como profesional y rendir al máximo, si queremos ser ese líder de referencia, es esencial que busquemos el equilibrio de esas 3 dimensiones o si no seguiremos siendo unos analfabetos emocionales.