Eras una razón para volver, para volver a esa ciudad, a mis raíces, a mi sangre. Eras ese momento para abrazar, oler tu cuerpo, sentir tu forma, quedarme en ti y esperar a que tus manos volvieran a rozarme, que tus ojos volvieran a traspasarme. Y ese momento en que borramos la inocencia, ese momento…
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