Aquel día que de reojo te vi, visualizando una vida a tu lado, descubrí que aquella ventana no era más que ilusiones que mi mente quiso crear. Creó un personaje ficticio (no existente) del cual yo me enamoré perdidamente. Y entonces, ¿por qué nos mentimos? No somos cocreadores de los sentimientos de los de más.…
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