La independencia financiera es un pilar fundamental para el empoderamiento de las mujeres y una herramienta crucial en la lucha contra problemas sociales graves como la violencia de género y los abusos. La capacidad de una mujer para gestionar sus propios recursos económicos no solo mejora su calidad de vida, sino que también le proporciona la autonomía necesaria para tomar decisiones seguras y libres sobre su futuro. Un ejemplo claro de esta intersección entre independencia financiera y otros desafíos sociales se encuentra en el programa de microcréditos “Womens Dreams” de la Fundación Square, que buscó ayudar a mujeres indígenas en México y a mujeres prostitutas a salir de la calle y a construir una vida digna.
La Independencia Financiera: Un Escudo Contra la Violencia
La relación entre la independencia financiera de las mujeres y la reducción de la violencia de género es directa y significativa. En muchos casos, la dependencia económica de una pareja abusiva puede atrapar a las mujeres en ciclos de violencia. Sin la capacidad de mantenerse a sí mismas y a sus hijos, muchas mujeres se ven obligadas a permanecer en situaciones peligrosas y perjudiciales.
El empoderamiento económico proporciona a las mujeres las herramientas para escapar de estas situaciones. Al tener acceso a sus propios ingresos, las mujeres pueden buscar ayuda, pagar por servicios legales y de salud, y mudarse a lugares seguros. Además, la independencia financiera eleva la autoestima y la confianza de las mujeres, factores que son cruciales para romper el ciclo de abuso.
El Programa Women’s Dreams de la Fundación Square
En agosto de 2014 el programa Women’s Dreams de la Fundación Square se diseñó para abordar precisamente estos problemas, enfocándose en dos de los grupos más vulnerables: mujeres indígenas en México e inicialmente mujeres prostituidas en Tailandia. Este programa de microcréditos tenía la misión de proporcionar a estas mujeres los recursos financieros necesarios para iniciar pequeños negocios y generar ingresos sostenibles.
Mujeres prostituidas en Tailandia:
El programa se dirigió inicialmente a mujeres prostituidas en Tailandia, un grupo que enfrenta una serie de desafíos complejos, incluyendo el estigma social, la violencia y la explotación. La iniciativa de Womens Dreams intentó ofrecer una alternativa viable a través de los microcréditos y asesoramiento en emprendimiento, con la esperanza de que estas mujeres pudieran abandonar las calles y construir una vida más segura y estable. Sin embargo el programa enfrentó obstáculos significativos, muchas de estas mujeres no quisieron acceder a las consultorías previas a los créditos y finalmente fue un fracaso del que se aprendieron valiosas enseñanzas que se aplicaron en las siguientes acciones.
Mujeres indígenas en México:
En muchas comunidades indígenas de México, las mujeres enfrentan barreras significativas para acceder a la educación y el empleo formal. La falta de oportunidades económicas las coloca en situaciones de vulnerabilidad extrema. El programa Womens Dreams buscó cambiar esto proporcionando microcréditos para que las mujeres pudieran iniciar sus propios negocios. Estas empresas, aunque pequeñas, ofrecían un camino hacia la autosuficiencia y la dignidad. Las mujeres que participaron en el programa recibieron no solo el capital inicial, sino también capacitación en habilidades empresariales, desde la gestión financiera hasta el marketing. Este apoyo integral fue clave para garantizar que los negocios fueran sostenibles a largo plazo.
Mujeres amenazadas en Afganistán:Finalmente el proyecto se dirigió a mujeres en situaciones de emergencia amenazadas de muerte. Con la llegada de los talibanes al poder en Afganistán las mujeres de todo el país pasan a ser consideradas humanos de segunda clase, recortando sus libertades y siendo perseguidas. Women’s Dreams se transformó como proyecto social de asesoramiento jurídico y tramitación de asilo político probono en colaboración con TPC Abogados, para asistir a más de una docena de mujeres en muchos casos con sus familias que lograron salir del país y ser trasladadas a España.