Hay un momento en la vida en el que la despedida se vuelve inevitable. A veces irrumpe como un rayo en medio de la calma; otras, la vemos llegar a lo lejos, avanzando lenta pero implacable. Nos resistimos, intentamos sujetarnos a lo que fue, a lo que pudo ser, a lo que imaginamos eterno. Pero…
Redactoras